3. No olvides estirarte
Antes y después de tus rutinas de ejercicio, es crucial que estires tus músculos. Estirarte antes de tus entrenamientos ayuda a relajar el cuerpo para que puedas estar al máximo desde el inicio. El estiramiento posterior al entrenamiento ayuda a los músculos a recuperarse y a evitar futuras lesiones.
4. Mantén a tu cuerpo a la expectativa
Si siempre haces lo mismo cada vez que vas al gimnasio, entonces no puedes esperar ver resultados diferentes. Necesitas mantener a tu cuerpo a la expectativa y sorprender a tus músculos cada vez que entrenes. Intenta nuevas rutinas, nuevas máquinas, nuevas posiciones y nuevas técnicas. Toma una clase de cardio de alta intensidad si normalmente sólo haces pilates, o toma yoga si eres una chica regular en la caminadora. Mezcla tu rutina y asegúrate de balancear tus entrenamientos de cardio con ejercicios tonificadores, ya que construir músculos quemará más calorías aunque no te estés ejercitando.