Es simple pero compleja al mismo tiempo. Y, de acuerdo a Gianni Bruzzone, el chef y fundador de Osteria Baccicin du Caru, un restaurante en Liguria, la secuencia de ingredientes importa: “él empieza con ajo, luego agrega los piñones, luego la albahaca, luego sal de mar (que ayuda a romper las hojas). Después de algunos minutos las hojas empiezan a romperse y los inicios de la salsa emergen. Entra un chorro de aceite y la salsa se vuelve sedosa. El queso es lo último y le da cuerpo y la hace cremosa, primero Parmigiano-Reggiano, y luego un pecorino añejado al final”.
