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Lo que necesitas saber sobre los rodillos de espuma

Te esfuerzas por cuidar de ti misma, así que naturalmente deberías sentirte bien. ¿Cierto? Tristemente, no es tan simple. Si tienes músculos adoloridos podría ser que algo te esté faltando. Y ese algo se llama rodillo de espuma. Los estiramientos son la primera cosa que se deja de lado cuando no tienes mucho tiempo y quieres maximizar tu ejercicio. Así como un calentamiento es crucial para iniciar cualquier ejercicio, recuperarte es esencial para asegurar que tus músculos se curen apropiadamente.

Los rodillos de espuma son una excelente manera de tratar músculos adoloridos y tejidos sensibles después del ejercicio, y la mejor parte es que puedes hacerlo tú misma. Suena increíble, ¿no? Lo es, pero antes de que empieces a hacerlo, mira estas 15 cosas que debes considerar antes de usar un rodillo de espuma.

1. Consulta a tu médico
Como cualquier forma de autodiagnosis o automedicación, deberías primero consultar a un doctor antes de hacer algo para aliviar tu incomodidad. Podrías pensar que sabes lo que está mal, pero un médico puede confirmarlo y asegurarse de que lo trates adecuadamente.

Lee también: 10 razones por las que un rodillo de espuma es tan bueno como un masaje

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2. Si no duele, no sirve
Si piensas que tus músculos duelen ahora, espera a que empieces a usar el rodillo. Podría no sentirse muy bien, de hecho, podría hasta doler. Prepárate. Y recuerda, un poco de incomodidad es una cosa, pero dolor intenso podría indicar un problema más profundo, así que consulta a tu doctor.

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3. El dolor se mueve
El dolor que experimentes al usar el rodillo podría aparecer en un lugar diferente al que estás tratando. No te asustes y recuerda que tu cuerpo entero está conectado.

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4. No olvides los estiramientos
Usar un rodillo de espuma es una manera excelente de aliviar músculos adoloridos, pero NO es un sustituto de los estiramientos. Un rodillo de espuma podría ayudar a tus músculos a recuperarse, pero estirarte apropiadamente ayuda a mantener tus músculos saludables.

5. Los resultados están en tus manos
Darte el poder de controlar la localización e intensidad de la presión, puede ser más eficiente que hacer que alguien más te trate.

6. Ayuda a restaurar el funcionamiento normal
Romper los nudos puede ayudar a restaurar el movimiento y funcionamiento normal de tus músculos. ¿Qué es normal? Claramente todos somos diferentes y “normal” es diferente en cada cuerpo, pero en general significa que puedas moverte fácilmente y sin dolor.

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7. Carne y músculos: no son tan diferentes
Aplicar presión a tu cuerpo con un rodillo de espuma es similar a ablandar carne. La compresión profunda ayuda a relajar las áreas rígidas de tu cuerpo y a ablandar tus músculos.

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8. Evita articulaciones y huesos
No deberías usar el rodillo directamente en tus articulaciones o huesos. Esto puede lastimarte y hacer más daño que bien.

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9. Mantenlo corto y dulce
No necesitas pasar mucho tiempo en un punto de presión en especial. Asegúrate de girar el rodillo lentamente, cubriendo aproximadamente una pulgada por segundo. Y cuando llegues a un área especialmente dolorosa, pausa por varios segundos y relájate tanto como sea posible.

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10. Aprende nuevas técnicas
Hay varias herramientas y técnicas diferentes que puedes probar para lograr resultados máximos. Prueba diferentes trucos y experimenta con varios aparatos para encontrar los movimientos y estiramientos que funcionan mejor para ti.

11. Toma la pelota
Si no tienes acceso a un rodillo de espuma o no quieres comprarlo, una pelota de tenis sencilla puede reemplazar un rodillo vendido comercialmente. Las pelotas pueden funcionar de manera similar, permitiéndote atacar puntos de presión donde sientas rigidez para liberar esos músculos.
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12. Dale un descanso a tus músculos
Podrías sentirte adolorida después del tratamiento, pero seguirás en el camino hacia la recuperación. Dale a las áreas adoloridas tiempo de recuperarse antes de volverlas a tratar.

13. Más no siempre es más
Mantén en mente que es posible tratar de más un área e incrementar el dolor e inflamación en lugar de aliviarlos. Esto pasa cuando pasas demasiado tiempo en un área o usas demasiada fuerza para intentar liberar tu músculo.

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14. La hidratación es clave
¿Recuerdas cómo después de un masaje el masajista te da un vaso de agua de pepino y te dice que te hidrates? No es sólo porque piense que podrías tener sed. Es importante hidratar tus músculos después de cualquier trabajo, lo que incluye ejercicio, terapia de masaje y tratamientos con rodillos de espuma.

15. Diagnostica áreas adoloridas
Además de tratar la rigidez de músculos adoloridos, tu rodillo de espuma puede ayudarte a identificar otras áreas que podrían sentirse algo adoloridas o sensibles. Como controlas en qué áreas quieres trabajar puedes usar tu rodillo para dos cosas: diagnóstico y tratamiento. Es una buena inversión.