Toma un descanso y respira profundo
Cuando tengas duda, retrocede, respira profundo, toma un descanso, y júntense de nuevo. Las cosas pueden volverse locas en la intensidad del momento, y sin una oportunidad para calmarte y acomodar tus pensamientos, tal vez termines diciendo algo de lo que te arrepentirás luego, y esa discusión rápidamente puede convertirse en una pelea. Aquellos que discuten con verdadera integridad saben cuándo retirarse, cuándo estar y no de acuerdo, o simplemente cuándo tomar un poco de aire para relajarse un poco.
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