Y las diferencias entre el caldo de hueso y el caldo tradicional no terminan ahí. El caldo de huesos está hecho al cocer a fuego lento (por horas, incluso hasta días) huesos de carne, huesos de puerco, huesos de pollo, o un mix de todos éstos. Puedes saborizar tu caldo de huesos simplemente usando vegetales (similar a los caldos tradicionales), o puedes llevar tu caldo a otro nivel añadiendo ingredientes como jengibre fresco, limoncillo, salsa de pescado, champiñones secos, vinagre de sidra de manzana, y otras hierbas. El resultado es un caldo que es complejo, rico, sabroso y realmente, realmente bueno para ti.
Lee también: 20 ricas recetas de sopa para esta temporada