Realmente no hay límite en la cantidad y tipo de snacks saludables que puedes darle a tu bebé. Todo depende, en gran parte, de qué le gusta, algunos bebés devoran los cubitos de batata y otros los rechazan con furia, algunos bebés aman las pasas y otros se las dan al perro. El truco está en ofrecer un montón de variantes al niño y tratar de mantenerte siempre en elegir alimentos enteros, crudos o en puré, dependiendo de la edad de tu hijo. Y recuerda, si no le gustan las manzanas o las zanahorias, o lo que sea, la primera vez, sigue intentándolo. Los bebés son criaturas volubles y, a lo mejor, lo que no le gustó la semana pasada, esta se convierte en su snack favorito, ¡especialmente con un poco de ayuda de mamá!