7. No des excesiva importancia a las cosas pequeñas
Recuerda que las mujeres se han dedicado a criar niños desde hace siglos. Una herida en la rodilla, un dolor de garganta o un mal día en el colegio rara vez ha demostrado ser una fatalidad. “Veo a tantas mamás recientes con pánico de que su hijo se caiga o derrame una lágrima”, dice Maria, madre de un niño mayor y dos gemelos de dos años. “Yo pienso que no pasa nada. Si no necesitan puntos, no es una emergencia. No es que permita a mis gemelos jugar con cerillas o cuchillos, pero a los niños hay que dejarlos que tengan su dosis de arañazos y cardenales. Es parte del proceso de crecer”. María puede estar en lo cierto. Aunque tú, por supuesto, tienes que atender a tu hijo en sus pequeños y grandes accidentes, el modo en que reaccionas le influenciará enormemente a la hora de reaccionar él mismo a los accidentes, la enfermedad e incluso el estrés. Así que en lugar de convertirte en la mismísima Florence Nightingale en cuanto ves una rozadura en su rodilla, aplica un antiséptico y sugiérele que regrese al parque a jugar con sus amigos, para que se siga diviertiendo.
¿Te convencen estos secretos de las mamás de éxito? ¿Cuáles son tus trucos de éxito para garantizar para una paternidad exitosa, armonía en el hogar y satisfacción personal?