4. Ravioli de castañas con mantequilla avellana y tomillo
Hicimos una regla de nunca decir no a cualquier cosa que tenga mantequilla de avellana, y este platillo, sin duda alguna, no decepciona. El ravioli nos recuerda a una pasta de calabaza butternut porque es igualmente suave y deliciosa, pero es menos dulce. Hacer la pasta a mano definitivamente requiere algo de paciencia y esfuerzo, pero valdrá la pena el tiempo cuando estés disfrutando del producto final.