Cuando se trata de medir la preparación de un niño para el jardín de niños, múltiples factores entran en juego. Primero, la madurez de tu hijo puede ser medida física, social y cognitivamente. Pero en la realidad, muy pocos niños son iguales en estas áreas. Muchos niños que son mentalmente más avanzados quizá se queden atrás emocionalmente, mientras que los niños que son hábiles físicamente puede que sean más lentos en términos de desarrollo del lenguaje. Así que, ¿estás lista? El Dr. Kyle Snow, director de The Center of Applied Research en la National Association for the Education of Young Children, dijo en Care.com: “Uno de los mejores aliados para tomar esta decisión, son los maestros de tu hijo de preescolar o su pediatra”. “Los maestros deben tener una mejor idea de si el niño puede cumplir las expectativas sociales y académicas”.
Para empezar, tu hijo debe tener un buen conocimiento de habilidades sociales básicas. La habilidad de regular sus emociones adecuadamente y de articular sentimientos con palabras es uno de los signos de que ellos podrían estar listos. Lo mismo con el uso palabras como por favor, gracias y discúlpenme y la habilidad de seguir instrucciones sencillas y fáciles. Las habilidades de socialización significan que tu hijo puede ajustarse a una nueva situación con relativa facilidad, e interactuar con ambos, sus compañeros y adultos, de una forma apropiada. Tómate un momento para considerar esto: ¿Tu hijo pide ayuda, muestra orgullo en sus logros, y se apega a una actividad hasta que la termina? ¿Qué hay de respetar los sentimientos y las cosas de los demás? como jugar de manera cooperativa al compartir y tomar turnos. Todas estas cosas son muy importantes para la conducta en el jardín de niños.
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Es un mundo desordenado el de ahí afuera, así que cuando se trata de la preparación para el jardín de niños, la higiene y autoestima son importantes. Por ejemplo, ser capaz de vestirse por cuenta propia, guardar sus juguetes o ropa, y asumir la responsabilidad de sus pertenencias lejos de casa (como por ejemplo un abrigo o lunch), son habilidades que necesitan. Pregúntate a ti misma si tu hija tiene buenos hábitos de higiene, modales para la mesa, y habilidades para ir al baño apropiadas. Si sí las tienen, y tiene una rutina y horario para la higiene personal y para comer sus comidas e ir a la cama todos los días, él o ella puede que esté listo para el jardín de niños. Luego está el reino psíquico de las habilidades motoras, como ser capaz de armar un rompecabezas, agarrar un lápiz, cortar con tijeras, construir con bloques o amarrar sus agujetas. ¿Qué tan bien se desempeñan durante las actividades en el exterior? como jugar con una pelota, correr, saltar, escalar y manejar un triciclo.
Ahora, como BabyCenter aconseja, considera sus habilidades de lenguaje, lectura y escritura. Ser capaz de hablar en oraciones (con cinco o más palabras y con dos o más ideas) usando un lenguaje descriptivo es un signo de preparación para el jardín de niños. Si tienes un pequeño artista que recita rimas de bebés con el corazón e inventa historias o canciones, estos todos son signos positivos. En general, un niño que tiene habilidades de lectura es curioso con respecto a mirar libros, dibujos o los signos cotidianos por cuenta propia y a menudo pretender estar “leyendo” las imágenes y etiquetas. ¿Tu hijo reconoce muchas mayúsculas y minúsculas así como sus sonidos? Puede que también tengas un pequeño que desafortunadamente le encanta arruinar libros hermosos al escribir encima de ellos, aunque esto en realidad es algo bueno. Si tu hijo está escribiendo, haciendo garabatos, dibujando o ya está escribiendo su nombre, este es un signo que su desarrollo de lenguaje está a la par de otros pequeños del jardín de niños y que está empezando a aprender a cómo leer. ¿Qué hay de recitar el alfabeto? La mayoría de los maestros del jardín de niños asumen que los niños por lo menos tienen una noción del ABC, aunque esto será cubierto con en el plan de estudios del jardín de niños.
Finalmente, por medio de Education.com, hay conceptos de matemáticas como contar de forma básica, reconocer algunos números del uno al diez, y distinguir números de letras. También es benéfico si tu hijo sabe el concepto de más, menos, nada, algo y todo. Todo esto ayuda para aprender las sumas y restas básicas. ¿Tienes un pequeño científico en tu casa? Mostrar interés en temas científicos reconociendo objetos en su medio ambiente y saber datos sobre plantas, animales y objetos en el cielo (como el sol, la luna, las nubes, etc.), también es fundamental. Tal vez tu pequeño es un artista en desarrollo. Si él o ella tiene habilidades en artes y música, reconocerá nombres de colores básicos, dibujarán formas reconocibles, se moverán al ritmo, y escogerán instrumentos musicales para mejorar con ellos. Para más información, Education.com tiene una lista útil que los profesionales usan para medir las habilidades de niños pre-jardín de niños.
