10. El Don Juan
Las palabras tienen la capacidad de emocionar a las mujeres y los hombres seductores saben muy bien cómo jugar sus cartas, pero no te enganches con sus halagos y promesas si no están respaldadas con acciones. A menudo, tales hombres, son sólo narcisistas que disfrutan verse y oírse a sí mismos actuando como amantes latinos irresistibles, pero no tienen la más mínima intención de cumplir sus promesas.