Hubo que superar el concepto de que los cereales eran comida para caballos, pero todo se hizo mucho más fácil cuando aparecieron los primeros cereales empaquetados y listos para el consumo sin tener que cocinarlos antes. El más famoso fue Cheerios, presentado en el mercado el 1 de mayo de 1941. Después de la II Guerra Mundial y el masivo Baby Boom, las compañías cerealeras se enfocaron en cereales para niños con sabores azucarados y forma de sus personajes favoritos de los dibujos animados. Aquellos cereales para el desayuno que nos encantaban de niños todavía son populares y tenemos que confesar que aún los encontramos deliciosos… incluso cuando se supone que ya no son para nosotros. Estos son algunos de los que desayunamos en secreto… ¡¡placeres secretos!!
No comeré ningún cereal que no convierta el color de la leche en morado. —Bill Waterson
