Estos consejos son de Garrett Macrine, quien sirvió durante varios años como soldado en las Fuerzas de Defensa de Israel en una unidad de lucha contra el terrorismo. Macrine era un soldado, médico e instructor de tácticas de armas de fuego para su unidad en el ejército, y ahora enseña entrenamiento de defensa personal y de armas de fuego como asesor privado.
1. Usa el elemento sorpresa
Siempre juega a la humilde actuando como si estuvieras asustada e indefensa, pero en realidad sabes que tienes algunos trucos bajo la manga. Mantén a tu atacante adivinando.
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2. Ve por los ojos
Alza las manos con las palmas abiertas como si estuvieses protegiendo tu cara. Así parecerá que te estás rindiendo. Tus dedos están abiertos y desplegados. Con los dedos abiertos y en un sólo movimiento rápido, toca el ojo de la persona. No tienes que pinchar el ojo para que sea eficaz, sólo tienes que hacer contacto. Esto hará que el atacante se ciegue por un segundo y retroceda. Como mujer, no quieres pelear, quieres aturdir. Cuando su ojo esté herido, sus manos irán a éste y ahí es cuando corres.
3. Spray pimienta
Siempre es bueno que las mujeres lleven consigo un spray pimienta. Trata de rociar directamente a la cara; los ojos son ideales. La idea, de nuevo, es cegar a tu atacante. El spray de pimienta tarda 5 segundos en hacer efecto, así que ten en cuenta ese dato. Una vez que rocíes, tienes que crear una situación en la él que no pueda tener sus manos encima de ti por 5 segundos.