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20 cosas que debes considerar al hacer tu plan de parto

El embarazo y el concepto de tener un bebé es un momento de muchos cambios abrumadores. Crear un plan de parto para el nacimiento es probablemente una de las cosas en tu larga lista de pendientes. Lo mejor de tener un plan de parto es que te da la oportunidad de considerar algunas opciones y hacer elecciones informadas. Lo peor es su nombre. Para muchas, en nuestras vidas diarias, un plan se hace y luego se sigue al pie de la letra, pero el nacimiento es completamente impredecible.

Suzanne Wong, obstetra, dice: “No me molestan los planes de parto siempre y cuando la paciente entienda que los planes de parto pueden cambiar dependiendo de cómo suceda el parto y que se sugieren decisiones basándonos en lo que sentimos que es lo mejor para la salud de la mamá y el bebé.” La Dra. Wong quiere decir que al progresar el parto, puede ser necesario desviarse del plan original para asegurar la seguridad. Los padres necesitan ser flexibles con el plan y estar abiertos a cambios de último minuto, comprendiendo que su médico de confianza hará todo lo que pueda para asegurar un resultado positivo. Afortunadamente, crear un plan de parto te permite informarte e influir en algunos de los factores que juegan un papel importante al momento de crear la experiencia de nacimiento que quieres.

1. Parto
La principal pregunta sobre el parto es la administración del dolor. Las epidurales son el método más ampliamente usado para aliviar el dolor. Una epidural es un goteo anestésico administrado por un catéter espinal en la espalda baja que entumece la mitad inferior del cuerpo. Mientras que ayuda a hacer al dolor de las contracciones soportable, algunas mujeres experimentan una ralentización del proceso de parto e incluso dificultad para sacar al bebé.

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2. ¿Una Doula?
Doula es una palabra griega que significa “sirviente de mujeres.” Tradicionalmente, una doula es una mujer que ayuda a la madre antes y durante el parto, dándole ánimos, apoyo físico y técnicas para manejar el dolor. Contratar a una doula es muy útil pues básicamente contratas a alguien para dedicarse a ti y ayudarte a honrar tanto como sea posible tu plan de parto. Pídele a tu médico una recomendación o consulta con algún centro de parteras cerca de ti.

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3. ¿A quién quieres presente en el nacimiento?
Esta es una situación en la que tienes un poco más de control. Primero investiga si el lugar del parto tiene alguna restricción en el número de personas que puedes tener en el parto. Luego llega la parte difícil: decirle a algunos familiares que no podrán estar ahí.

4. ¿Dónde quieres dar a luz?
Elegir una locación para tu parto es probablemente la decisión más importante que tomarás. Cuando eliges un centro de nacimiento o un parto en casa, también estás eligiendo un parto sin supervisión médica oficial, lo que significa que sólo se te darán medicamentos si hay alguna emergencia y tienes que ser llevada al hospital. Los centros de nacimiento emplean parteras, doulas, enfermeras registradas y con frecuencia tienen a un médico u hospital cerca. Un parto en un hospital es atendido por varios médicos: obstetra, perinatólogo, anestesiólogo, etcétera.

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5. ¿Quieres un parto en el agua?
Hay evidencias que indican que los partos en el agua son menos dolorosos y más relajantes tanto para la madre como para el bebé. Si esto te llama la atención, averigua con tu hospital si tienen las instalaciones.

6. ¿Cuáles son tus posiciones de parto?
Podrías practicar algunas diferentes antes de que llegue el gran día. Mientras que un parto tradicional tiene a la madre sobre su espalda, con las rodillas levantadas para pujar, algunas mujeres encuentran que agacharse o estar sobre sus manos y rodillas es mejor para las contracciones y para pujar eficientemente.

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7. ¿Quieres usar Pitocina?
La pitocina, un medicamento que imita los efectos de la hormona oxitocina, es a veces usada para iniciar o aumentar una labor de parto que esté muy lenta. Hay pros y contras. Los beneficios incluyen pasar menos tiempo en el parto o reiniciar un parto que se ha detenido. Los negativos incluyen que puede acelerar los latidos del bebé, incrementar el dolor para la madre y muchos piensan que el parto debería durar lo que tenga que durar. La decisión es tuya.

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8. ¿Qué tipo de ambiente quieres?
Tu compañero en el parto o tu doula pueden hacer algunas cosas sencillas para hacer que el parto sea mejor, como usar música, iluminación apropiada e incluso aromaterapia.

9. Condiciones en las que la episiotomía es aceptable.
Una episiotomía, o incisión quirúrgica en el perineo para abrir más espacio para el nacimiento, a veces es necesaria. En algunos casos previene el desgarre excesivo de la vagina y el perineo. Algunos creen que es una técnica usada de más y que los músculos del perineo pueden extenderse por sí mismos.

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10. ¿Qué empacar en tu maleta para el hospital?
Dependiendo de qué tanto tiempo pretendas quedarte en el lugar del parto, necesitarás algunas mudas de ropa y el resto depende de ti. ¿Te sientes más cómoda en una bata? ¿Vas a tener invitados y qué te gustaría usar para recibirlos? ¿Qué otras cosas te harían sentir en casa?

11. ¿Cuándo cortar el cordón umbilical?
Los expertos están de acuerdo en que no hay urgencia cuando se trata de cortar el cordón umbilical. De hecho, se piensa que el flujo de sangre y nutrientes prolongado al bebé después del nacimiento facilita la transición. Si decides prolongar el corte, díselo a tu hospital con anticipación.

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12. ¿Quieres circuncidar a tu bebé?
Si planeas circuncidar a tu bebé en el hospital, algunos hacen la cirugía después del nacimiento. Otros harán que regreses después. Si eliges no hacerlo, sé clara en tu plan de parto.

13. ¿Vas a dar pecho?
Tu hospital o centro de nacimiento es un recurso excelente si quieres dar pecho, pues esto es natural y maravilloso pero no siempre es fácil. Asegúrate de informar a tus cuidadores que te gustaría amamantar a tu bebé y que quieres su apoyo. Aprovecha a los especialistas de lactación para hacerles preguntas y recibir apoyo.

14. ¿Quieres almacenar la sangre del cordón umbilical de tu bebé?
Esta es otra elección que haces con anticipación. Almacenar la sangre del cordón es un servicio que puedes usar para almacenar la sangre que queda en él de modo que puedas usar sus células madre e información para beneficiar a la familia en caso de enfermedad. Si eliges hacerlo, tu institución tendrá que enviarla al lugar de almacenamiento.

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15. ¿Qué quieres hacer con la placenta?
La placenta solía ser descartada después del nacimiento. Información nueva sobre su valor y varios usos ha surgido, incluyendo sus beneficios nutricionales y de salud para la nueva madre. Algunas personas la conservan y la convierten en cápsulas para ingerir después. Si te gustaría hacerlo, hazlo saber a tus cuidadores.

16. ¿Quieres que tu bebé duerma contigo?
El hospital con frecuencia te dará la opción de llevar a tu bebé al cuarto de niños entre comidas o dejarlo junto a tu cama. Esta es una de las elecciones que puedes hacer con anticipación y luego cambiar.

17. ¿Quieres alimentar y ver a tu bebé antes de que lo bañen?
Se piensa que la capa sobre la piel del bebé justo después de su nacimiento es buena para su piel y su salud. Si te gustaría atrasar la limpieza del bebé y tenerlo entre tus brazos, puedes decidir que tu bebé sea puesto en ellos antes de que lo bañen.

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18. ¿Quieres que se le dé un chupón a tu bebé?
Hay pros y contras en el uso del chupón. El punto principal en su contra es que algunos creen que puede interferir con el aprendizaje de cómo succionar. Si sientes que un chupón puede disminuir tus posibilidades de amamantar a tu bebé, tendrás que decírselo al personal del hospital para que no le den uno automáticamente a tu bebé.

19. ¿Cómo lidiar con el dolor posparto?
Los doctores tienen a ser mucho más generosos con los medicamentos para el dolor cuando ha habido una cesárea. Asegúrate de informar a tu doctor si sientes que necesitas asistencia para manejar el dolor después de un parto natural.

20. ¿Cuándo se irán a casa?
Dependiendo de cómo vayan las cosas, podrías tener elección. Las cesáreas requieren que te quedes en el hospital lo suficiente para determinar que te hayas recuperado de la cirugía. Un parto natural que sale bien para madre y bebé, en cambio, requiere mucho menos cuidado posterior. Si tienes ayuda en casa o ya quieres regresar a tu ambiente, asegúrate de decírselo a tu médico. Sino, disfruta de la asistencia extra con el bebé de las enfermeras y doulas posparto.