Todas tenemos miedos, tenemos cosas nos asustan, y preocupaciones que evitan que logremos lo que nos hemos propuesto a lograr. Es completamente normal y común vivir con miedo de vez en cuando. El problema surge cuando esos miedos te controlan y evitan que disfrutes lo que amas, y te dejan con un sentimiento de insatisfacción y llena de arrepentimiento. Como Psychology Today informa, de acuerdo con Melanie Greenberg Ph.D.: “El arrepentimiento es un estado negativo cognitivo/emocional que involucra culparnos a nosotras mismas por un mal resultado, un sentimiento de pérdida o lamento con respecto a “poder haber sido”, y desear que pudiéramos deshacer las decisiones que hemos tomado”. Pero el objetivo debería ser vivir sin arrepentimientos y realmente vivir.
El arrepentimiento a menudo está ligado a un resultado negativo o sentimiento de fracaso, pero rara vez se percibe cuando haces algo de forma pésima o te equivocas. El arrepentimiento a menudo ocurre cuando no haces algo, te reprimes, no intentas dar lo mejor de ti o ni siquiera intentas. Y desafortunadamente, el arrepentimiento no es un sentimiento momentáneo que se va rápidamente para que puedas seguir avanzando. Algunas veces el arrepentimiento comienza contigo, y con el paso del tiempo puede resultar en ansiedad y estrés crónicos que te agobian y te reprimen todavía más. Es un círculo vicioso.
Lee también: Solo hazlo: Cómo vivir la vida y evitar tener arrepentimientos
Entonces, ¿cómo puedes vivir tu vida sin arrepentimientos? ¿Si quiera es posible evitar por completo el arrepentimiento? Hablando de forma realista, tal vez no seas capaz de eliminar al 100% el arrepentimiento y miedo de tu vida. En un mundo perfecto tal vez sería posible, pero el mundo no es perfecto y tenemos defectos. Pero lo que sí puedes hacer es controlar cómo reaccionas cuando te enfrentas al miedo, cómo controlar los arrepentimientos que tengas, y cómo cambiar tu comportamiento y actitudes para seguir adelante y así evitar arrepentimiento adicional a largo plazo. Como Jackson Brown escribió en su famoso libro Life’s Little Instruction Book: 511 Suggestions, Observations, and Reminders on How to Live a Happy and Rewarding Life, (que comenzó como un consejo para su hijo adolescente): “Dentro de 20 años estarás decepcionado por las cosas que no hiciste que por aquellas que sí hiciste. Así que suelta las cuerdas de tus velas. Zarpa lejos de puerto seguro. Atrapa los vientos favorables en tus velas. Explora. Sueña. Descubre”. Y no, ese no fue Mark Twain, aunque muchas personas atribuirán erróneamente esta cita brillante a esa figura histórica. Si estás lista para comenzar a vivir con menos arrepentimiento, aquí hay unos tips para ayudarte a aprovechar al máximo la vida, comenzando el día de hoy.
Deja de enfocarte en el riesgo
Siempre habrá riesgos en la vida, y la mayoría de las cosas que valen la pena tener y por las que valen la pena luchar vienen con riesgos inherentes. Lucha por lo que quieres y concentrarte en la meta final, no en todas las cosas que podrían salir mal a lo largo del camino. Esos riesgos siempre estarán ahí, pero si dejas que se apoderen de ti, entonces nunca irás al lugar al que quieres ir y pasarás el resto de tu vida preguntándote “y que tal si”.
Anticipa el fracaso y acepta tus errores
Te equivocarás y cometerás errores. Y eso está bien. El fracaso está bien. De hecho, puede ser realmente saludable. Toma al fracaso como una oportunidad para aprender, crecer y ser mejor. De esa forma no estarás muy asustada de equivocarte, y de hecho puedes trabajar para lograr tus metas en vez de pensar en todas las formas en las que podrías fracasar.
Cree en los milagros
Incluso si las probabilidades de hacer algo bueno son escasas, tal vez una en un millón, qué importa. Todo lo que necesitas es una oportunidad para lograrlo. La gente puede, y sí vence, a las probabilidades todos los días, nunca olvides eso.
Encuentra cosas divertidas en las cosas cotidianas en tu vida
Si no puedes reírte de ti misma, tu vida va a ser mucho más estresante y decepcionante de lo que te gustaría. Aprende cómo encontrar diversión en tus experiencias diarias y obstáculos. Ríete de las cosas que haces mal y sonríe, porque lo intentaste. Incluso si algo no sale de la forma en la que lo planeaste, si te concentras en lo divertido recordarás la forma en la que te sentiste cuando te estabas riendo y no en el sentimiento del fracaso.
Práctica la aceptación (hacia tu persona y hacia tus seres queridos)
Si pierdes todo tu tiempo y energía tratando de cambiar quién eres, o esperas que tus seres queridos cambien, entonces toda tu atención estará solo en las cosas que están mal o que hacen falta en tus relaciones, en vez del amor que tienes y las personas que te quieren. Mirarás hacia atrás y verás esos sentimientos y tiempo perdido con arrepentimiento en lugar de unos con alegría. En vez de eso acepta quién eres y acepta quiénes son ellos. Concéntrate en lo que amas y aprecias de cada uno en vez de las cualidades que desearías fuesen diferentes.
Sé atrevida e intenta nuevas cosas
Incluso si piensas que no puedes hacerlo, no estás segura si te gustará, o estás nerviosa por el posible resultado, hazlo de todas formas. Intentar una nueva actividad, comer un alimento nuevo, explorar un nuevo vecindario, usar una nueva palabra, hacer un nuevo amigo… haz algo diferente y nuevo cada día. Sé atrevida, y recuerda que sin importar lo que pase, estarás bien. El sol saldrá de nuevo, será un nuevo día, continuarás moviéndote hacia adelante, y otra vez intentarás algo nuevo mañana.
Mira a tu alrededor y aprecia el momento
Pasamos nuestro tiempo corriendo por la vida y con los ojos pegados en nuestros celulares o pantallas de computadora, y rara vez nos detenemos a mirar y apreciar lo que hay a nuestro alrededor. Ten interacciones cara cara con otras personas; simplemente siéntate en el parque y mira a tu alrededor; ve hacia arriba; toma un gran respiro; y en verdad date cuenta del mundo que te rodea.
Todos los días haz por lo menos una cosa de la que estés orgullosa
En vez de enfocarte en lo que no hiciste, enfócate en lo que hiciste bien. No importa si es algo grande o pequeño, pero todas las noches cuando te vayas a dormir piensa sobre un momento, acción o logro del que estés orgullosa. Tal vez has cocinado una cena deliciosa, tal vez te has reconectado con una vieja amiga, tal vez llevaste puntualmente a tus hijos a la escuela, o tal vez tuviste un ascenso en tu trabajo; siempre hay algo de que estar orgullosa. Enfócate en eso, sonríe, y luego prepárate para lograr una nueva meta mañana.