Sí, hablamos en serio, la pesca. Esta actividad, que generalmente es relegada a viejos gruñones, o a los hombres en general, en realidad es algo que todos deberíamos considerar. La pesca nos proporciona tiempo y espacio para relajarnos, concentrarnos y disfrutar del y silencio. Cuando estamos ahí fuera en el agua, estamos llenándonos de toda la vitamina D de la luz del sol mientras entablamos conversaciones a menudo profundas y significativas con nuestros seres queridos. Es una de las pocas maneras en que verdaderamente podemos desconectar de todo.
Herbert Hoover dijo: “La pesca es mucho más que los peces. Es una gran oportunidad de poder volver a la simplicidad de nuestros antepasados“, y creemos que eso es totalmente cierto. La pesca puede ser un arte perdido de habilidad y paciencia, pero si tanto si atrapas dos pececillos o una trucha de récord, la experiencia y el Omega-3 son increíblemente saludables para ti. En cuerpo y mente. Si aún tienes dudas, aquí te presentamos diez maneras en que la pesca nos hace más sabios.
1. Enfoque, relajación
La pesca es un deporte que requiere atención y tiempo. Casi se requiere alcanzar un estado meditativo, puesto que tienes que estar tranquilo para no molestar a los peces. Por lo general, se pesca en ambientes tranquilos que fomentan una gran relajación.
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2. Hábitos saludables
Comer pescado es bueno para ti, no hay misterio en eso. Los ácidos grasos Omega-3 promocionan la salud del corazón y el cerebro, comer peces te hace, literalmente, más sabio.
3. Orden
El proceso de pesca implica una buena planificación y capacidad organizativa. Tienes que preparar el equipo adecuado y asegurarte de que cuidas tus suministros. Este proceso estimula la mente y mantiene tu cerebro ágil y agudo.
4. Mano-ojo
Sacar el señuelo de la caña de pescar requiere una destreza óculo-manual sólida. Utilizar esta destreza de coordinación, y los músculos implicados en ella, por la pesca puede fortalecer la coordinación mano-ojo.
5. Resistencia
La pesca es un proceso de inversión de tiempo que, a menudo, involucra sesiones de varias horas. Por lo general, implica tiempo “perdido” pero cuando el señuelo está en el agua, necesitas estar comprometido y está listo para cuando pique un pez. Obviamente no estamos hablando resistencia física, sino de aguante mental y capacidad de concentración durante un período prolongado de tiempo.
6. “A quien madruga…”
Tradicionalmente, los viajes de pesca comienzan muy temprano para llegar al lagos o río elegido. de elección. Madrugar pone el cuerpo y la mente en movimiento; y según del Forbes.com en “Top 10 ventajas de madrugar”, despertarse temprano nos hace más sabios porque proporciona un mejor sueño, nos hace proactivo y motiva a hacer ejercicio.
7. Aprendizaje de los patrones climáticos
Para capturar los mejores peces, hay que saber esperar a la intemperie. Planifica tus viajes de pesca de manera que conozcas de antemano los patrones climáticos y tengas una mejor comprensión del entorno.
8. Confort al aire libre
Si pescas de manera regular, te sentirás cómodo en el exterior y, a través de esa comodidad, aprenderás a respetar y amar el medio ambiente mucho más.
9. Técnicas de resolución de imprevistos
Parte de la pesca es comprender qué herramienta se necesita para cada situación. Puesto que nada sale exactamente como estaba previsto y la pesca dista de ser una ciencia perfecta, también necesitas ser flexible para obtener el resultado ideal, es decir: un pez.
10. Buena para todas las edades
La pesca es un deporte perfecto para todas las edades y niveles de habilidad. Todos pueden pescar juntos. Según TakeMeFishing.org, pescar es una diversión universal para todos.