3. ¡Puede mejorar las relaciones sexuales!
Puede que seas una de esas personas que le encanta soltarse en cualquier momento que entras a la pista de baile. Pero tal vez has estado haciendo tus mejores movimientos a puerta cerrada debido a los sentimientos de timidez y vergüenza. Tomar una clase de baile no es sólo bueno para tu cuerpo, es una gran manera de relajarse y perder esos sentimientos de auto-conciencia, ¡e incluso puede mejorar su vida sexual! Perder esos sentimientos de inhibición también traerá un sentido de diversión a tu rutina de ejercicios si te sientes atrapada en una rutina.
4. Puede ponerte en “La Zona”
Cualquier persona que ame bailar puede hablarte sobre alcanzar un estado de “flow” cuando menean su cuerpo. Entonces, ¿qué es el “flow”? “El flow es un concepto en la psicología positiva (originalmente propuesta por el investigador húngaro Mihály Csíkszentmihályi)”, explica Walters. “El flow es un estado óptimo de un enfoque absoluto y en el que el tiempo deja de existir temporalmente; una “se pierde a sí misma” por estar realizando la tarea en cuestión. Un ejemplo de flow es la “euforia” que muchos corredores experimentan en la carretera. “Así es, se trata de una “euforia” que no involucra a un café o un cóctel y que elimina calorías y mantiene a tu cuerpo en forma. ¿Qué más se puede pedir?
5. Ayuda a la estabilidad y al equilibrio
Ya sea que se trate de Zumba, salsa, o belly dance, bailar te mantiene equilibrada y coordinada. “Todos los tipos de baile requieren un cierto nivel de coordinación entre los grupos de músculos”, dice Walters. “Esto promueve la conciencia cinestésica, la comunicación mente-cuerpo, el equilibrio y la estabilidad.” Bailar también ayuda a cumplir otros objetivos de estar en forma que involucran al equilibrio. “Bailar mejora la agilidad, ya que te mantiene moviéndote y cambiando en todos los planos de movimiento; de adelante hacia atrás, de lado a lado y rotando, lo cual es una meta para el entrenamiento de fitness ya que el movimiento multi-plano domina las actividades de la vida diaria “, explica Walters.
