Si estás harta del brócoli y ya estás cansando de la tendencia de la col rizada, entonces necesitas unas recetas con acelga de colores pronto. Después de todo, la mitad de la batalla de hacer un platillo sabroso es preparar un platillo que se vea tan bien como sabe, y la acelga de colores definitivamente es hermosa en cualquier plato. Y como un bonus extra la acelga de colores es increíblemente buena para ti. Similar a la acelga suiza y otros miembros de la familia de la acelga, la acelga de colores puede ser consumida cocida o cruda y está cargada con fibra dietética, vitaminas A y K y hierro. También es baja en colesterol y muy baja en grasa. Y si eso no es suficiente, un estudio del 2009 publicado en Food, Agriculture and Environment reportó que: “La acelga es una fuente rica en polifenoles, compuestos antioxidantes que tal vez ayude a bajar los riesgos de enfermedades cardiacas, cáncer, diabetes, osteoporosis y condiciones neurológicas degenerativas como el Alzheimer”.
En resumen: deberías estar comiendo más acelga de colores, y debido a que hay muchas formas de preparar este vegetal, no te enfermarás pronto. Aquí hay 10 recetas con acelga de colores que harán que tu mesa se vea hermosa, tu concina huela asombrosa, y que tu cuerpo y papilas gustativas sean realmente felices.
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1. Acelga suiza y tarta de hierbas
Es difícil que no guste cualquier platillo que venga con una corteza crujiente, y aunque el relleno está hecho de acelga, cebolla y mucho queso salteados, es casi imposible no emocionarse. Esta tarta sabrosa es perfecta para tu próxima cena o reunión (o tal vez simplemente una noche acogedora en casa con una comida casera deliciosa), y debido a que no sólo es increíblemente deliciosa, sino también cargada con vegetales saludables, no tienes que sentirte culpable por tener una segunda porción.
2. Limoncillo y sopa de huevo-genjibre con acelga de colores
Si quieres un platillo rico y reconfortante que te caliente por dentro y por fuera, esta sopa es todo lo que has estado buscando. Repleta con acelga rica en nutrientes y jengibre, más cebolletas, ajo y huevo; esta sopa tradicional asiática es una comida por sí sola, y realmente es fácil de preparar cuando quieres un sopa rápida de diosa.
3. Buñuelos de acelga
Estos buñuelos de acelga van a ser tu nuevo platillo ideal que la familia completa disfrutará. Son crujientes en el exterior, exquisitas en el interior, saladas, condimentadas y un poco cremosas. Tus hijos las amarán y ni siquiera se darán cuenta que están comiendo vegetales, lo garantizamos.
4. Acelga suiza ajosa y garbanzos
Las acelgas de colores salteadas funcionan perfecto con los garbanzos y el queso feta cremoso. Aunque este platillo es un acompañamiento, podrías servirlo como primer plato, o simplemente disfrutarlo para el lunch. Y parece que preparas mucho, pero confía en nosotras, la acelga se cocina rápido, así que no escatimes en las cantidades cuando estés cocinando.
5. Acelga de colores salteada con ajo y limón
Muy simple pero muy delicioso, eso es lo que hace a este platillo tan asombroso. Solo necesita de 6 ingredientes (y dos de ellos son sal y pimienta, que apenas cuentan), y requiere cerca de 10 minutos prepararlo, y aun así es tan delicioso y sabroso que querrás servirlo todos los días para todas las comidas. No omitas la ralladura de limón, eso es lo que realmente añade algo de sabor refrescante a este platillo colorido.
6. Orecchiette con salchicha, acelga y chirivia
En vez del grelo amargo, que menudo ves mezclado con salchicha y orecchiette, este platillo delicioso usa acelga y chirivía para balancear el sabor de la salchicha y añade color a esta pasta llenadora. Es un milagro en un olla que querrás cocinar una y otra vez.
7. Pera rostizada y ensalada de de acelga de colores
Es difícil decir si la acelga de colores es más disfrutable en un estado cocido o crudo, pero esta ensalada hace el argumento para consumir un montón de vegetales crudos. Y la receta es tan fácil. La acelga es juntada con peras rostizadas, que es un combo perfecto—la dulzura de las peras balancean el sabor de la acelga, y la vinagreta de champaña, más el queso salado y cremoso, hacen el platillo entero.
8. Bowls de acelga de colores, queso feta y orzo
Piensa en esta receta como una versión más saludable de una ensalada-pasta. Es colorida gracias a los tallos y hojas de la acelga, de las cuales todas son salteadas antes de añadirlas al bowl integral y a la mezcla de feta. Algunas nueces tostadas añaden algo de crunch extra y el resultado es un bowl sabroso que se ve asombroso y sabe asombroso. Además, podrías hacerlo libre de gluten simplemente omitiendo el orzo y optar por quínoa en su lugar.
9. Ensalada de acelga de colores
Olvídate de la ensalada clásica aburrida; esta ensalada de acelga de colores es todavía más sabrosa y buena para ti. Está llena de sabores intensos y tiene una mezcla de texturas en cada mordida que son interesantes, además la ensalada funciona bien como un acompañamiento o un topping para un sándwich. Siéntete libre de dejar fuera cualquier ingrediente que no te guste—la belleza de este platillo es que está basado en la flexibilidad de lo que tengas a mano y cómo te gusten tus ensaladas.
10. Acelga suiza picante
Como la espinaca o cualquier otra verdura verde, las acelgas se cocinan rápido, así que esta receta entera, de inicio a fin, solo requiere cerca de 10-15 minutos, y al final obtienes un platillo lleno de sabor y picante que sabe como si hubieses cocinado por horas. Las hojuelas de chile rojo y ajo realmente resaltan el sabor de la acelga, y el azúcar balancea el sabor y picante de este platillo vegetariano.
Foto 1 cortesía de Food Network.com
