¿Eres la última que llega a la oficina? Si sí, probablemente sientes que necesitas ser la última en irte también. Si estás cansada de salir tarde y del ciclo vicioso de estar cansada y no llegar al trabajo a tiempo mañana tras mañana, no hay tiempo como el ahora para liberarte. No sólo eres más productiva en la mañana, sino que es posible que tus retrasos estén dándote una mala imagen.
Incluso si tu jefe no te ha reprendido por llegar tarde, la puntualidad es una virtud y un signo de respeto a tus compañeros. William Shakespeare, comentador maestro sobre la naturaleza humana, dijo: “Mejor tres horas antes que un minuto demasiado tarde.” Es probable que si le preguntas a tus compañeros de trabajo, familia y amigos, estarán de acuerdo. Es ahora el momento de empezar a llegar al trabajo a tiempo, y aquí hay 12 consejos para hacerlo más fácil.
1. Si aplazas, pierdes
Presionar el botón de ‘aplazar’ es una práctica ineficiente. Esos ocho minutos extra no harán una diferencia en tu falta de sueño y hacen que llegar al trabajo a tiempo sea más difícil. Si no puedes salir de la cama sin una batalla contra el botón de aplazar, entonces pon tu alarma 20 minutos antes para crear un colchón en contra del aplazamiento.
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2. Ve rápido
Otro consejo para ser puntual es adelantar la hora. Si manejas, adelanta el reloj del carro unos 15 minutos. Si no, adelanta tu reloj de pulsera. Lo veas o no, esto hará que te apresures, y si tienes algún problema, tendrás un colchón de 15 minutos.
3. Descansa
Mientras más falta de sueño te sientas, más querrás quedarte en cama en la mañana. Apaga tu televisión y deja de surfear en internet durante la noche. No te perderás de nada si simplemente te vas a dormir cuando tu cuerpo te lo pida y podrás ser más productiva y puntual al día siguiente.
4. Sobreestima
Cuando planees tu horario, separa un poco más de tiempo del que piensas que necesitarás para cada actividad. Esto es especialmente cierto si tienes hijos, porque con ellos todo será menos eficiente y más inesperado. Piensa en cada cosa que tengas que hacer en la mañana, calcula cuánto te tomará, y luego agrega algunos minutos a cada paso. Estarás feliz de haberlo hecho cuando encuentres una mancha en tu traje, tráfico en el camino o una fila larga en la escuela.
5. Planea para lo peor
La puntualidad se basa en el pesimismo. Aprende a esperar tráfico cuando no debería haberlo. Asume que el tren se echará a perder por algunos minutos. Intenta imaginar que el lector de tarjeta de crédito en el Starbucks no estará funcionando. Si tienes un tiempo del colchón, estos imprevistos no te atrasarán.
6. Sé realista
Si necesitas una hora entera para alistarte, entonces separa una hora en vez de intentar hacer a cada día el día en el que mágicamente logras estar lista en 30 minutos. Si no sabes cuánto tiempo necesitas realmente, intenta llevar un registro de tus salidas y llegadas por algunas semanas y ve qué tan rápido te mueves.
7. Prepara
Planear con anticipación es clave. No permitas cosas que te atoren, como decidir qué atuendo usar. Elige todo la noche anterior, empaca tus cosas y prepara tu comida. Haz esto para todos los miembros de la familia que vayan contigo en la mañana.
8. Organiza
Mantén tu abrigo, botas, llaves, teléfono y bolsa en el mismo lugar conveniente. Lo último que quieres agregar a tu rutina matutina es organizar una búsqueda de las cosas esenciales.
9. Ajusta tu reloj interno
Al entrar en ritmo y repetir estas tareas para salir de casa estarás ajustando tu reloj interno. Podrías descubrir que necesitas levantarte a la misma hora los fines de semana para que tu cuerpo adquiera el hábito, pero pronto te despertarás incluso minutos antes de que suene la alarma.
10. Ten una rutina
Si sigues los mismos pasos cada mañana, dejarás de desperdiciar tiempo pensando en qué hacer después e incluso podrás hacer las cosas pequeñas medio dormida. Todo el tiempo que ahorres siendo mecánica en la mañana lo podrás usar después.
11. Enfrenta las consecuencias
A menos que realmente entiendas las consecuencias de llegar tarde, no intentarás ser puntual. Ya sea que te penalicen en el trabajo o no, deberías saber que da una mala imagen, en especial si lo haces de manera crónica.
12. Trae un libro
Al empezar a pulir tu puntualidad, te encontrarás llegando temprano al trabajo y a tus citas. Si ese es el caso, prepárate. Usa esos momentos extra para revisar tu correo o hacer cualquier otra cosa que tu nueva puntualidad te permita.