Sólo porque sobreviviste la adolescencia no significa que estás libre del peligro de las espinillas. De hecho, un estudio de 2012 publicado en Journal of Women’s Health informó que este problema afecta a casi la mitad de todas las mujeres entre 21- 30, una cuarta parte de las mujeres de entre 31 a 40, y el 12% de las mujeres entre 41- 50.