Respirar es lo primero y lo último que hacemos en esta vida. Estamos tan acostumbrados a ello que no le damos la importancia real que tiene. Entre el nacimiento y la muerte, donde dejamos nuestro último suspiro, respiramos de forma inconsciente millones de veces. Independientemente de tu edad, tu estilo de vida, tu profesión o tu entorno, cuanto más te concentres con la respiración consciente, más te conectarás con tu “yo” interno, equilibrando muchos otros aspectos que quien eres.
“La Respiración Profunda ayuda a bajar los niveles de estrés y provee de beneficios notorios para la salud. Te sentirás más calmada después de hacer ejercicios de respiración profunda y puede que tus sentimientos de ira o enojo se conviertan en un estado mental relajado y concentrado. La respiración profunda se utiliza, en ocasiones, para tratar desórdenes de ansiedad, problemas de sueño y dolores y malestares en general”, dice Melanie Tucker en Livestrong.com.
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A la Respiración Profunda también se la conoce como respiración Diafragmática, Respiración Abdominal, Respiración Ventral, y Respiración Controlada. Cuando respiras de forma profunda y consciente, el aire que entra por tu nariz, llena tus pulmones y desplaza el vientre inferior, asomándolo. Para muchos de nosotros, este tipo de respiración parece muy poco natural y la imagen que vemos resulta antiestética porque nuestra cultura nos dice que un estómago plano es atractivo y un vientre relajado y distendido no lo es. Por ello, muchas personas mantienen sus músculos abdominales contraídos y no respiran bien. Lo hacen de forma superficial y eso aumenta su tensión y ansiedad.
Dicho esto, ya sabes que hacer Respiración Profunda es bueno para ti. En Mamiverse hemos investigado acerca de técnicas de Respiración Profunda que puedan ayudarte, y hemos reunido estas 8.
1. Respiración Coherente. Esto consiste en realizar 5 respiraciones por minuto. 5 inspiraciones y 5 espiraciones. Este ritmo maximiza el índice de variación cardíaca (HRV), cuanto más alto sea este índice, mejor para la salud cardíaca.
2. Respiración de Resistencia. Es, exactamente lo que su nombre indica. Respirar ofreciendo resistencia al paso del aire. Puedes lograrlo obturando las entrada y salida del aire frunciendo los labios, colocando la lengua contra los dientes superiores, o respirando a través de un sorbete o pajilla entre otras cosas. Esto parece un poco complicado, así que puedes, simplemente, respirar por la nariz en vez de por la boca.
3. Respiración Móvil. Aquí la cosa es que tu respiración recorra mentalmente tu cuerpo, como un masaje virtual. Puedes hacer un recorrido desde tu cabeza hasta los pies o hacer circuitos menores, el asunto es contactarte con esas partes específicas de tu cuerpo para aumentar la percepción del “yo” y la concentración.
4. Respiración de Un Minuto. Cierra los ojos casi del todo fijando la vista en la punta de tu nariz. Inhala muy lentamente por 20 segundos. Contén el aliento por 20 segundos. Exhala muy lentamente por 20 segundos. Vuelve a empezar. Haz esto por 3, 11 o 31 minutos cuando te sientas desbordada, confusa o necesites un poco de paz.
5. Respiración Ujayii. Inhala profundamente, con la boca cerrada, exhala a través de la nariz mientras contraes los músculos de la garganta. Sabrás que lo estás haciendo bien si suenas como Darth Vader de Star Wars.
6. Respiración nasal Prana Yama. Siéntate con la espalda derecha y los hombro relajados. Pon tu mano izquierda en tu rodilla izquierda, con las palmas abiertas hacia arriba. Coloca la punta del dedo índice de tu mano derecha entre tus cejas, el anular, pulgar y el meñique en el orificio nasal derecho. Presiona el pulgar contra el orificio nasal derecho y respira por el izquierdo. sin soltar el aire, y con los mismos dedos, tapona ahora el orificio izquierdo de la nariz y exhala por el derecho. Después haz al contrario, inhala por el derecho y exhala por el derecho, entonces habrás completado una respiración Prana Yama. Hazlo 9 veces alternativamente con los ojos cerrados.
7. Ejercicios de respiración para dormir mejor. Utiliza esta técnica para llegar relajada al sueño y tener una mejor calidad de descanso. Hasta puedes tener cerca lápiz y papel para apuntar las ideas o pensamientos que te surjan antes de quedarte dormida.
8. Ejercicios de respiración para mejorar la vida sexual. Estos ejercicios te van a ayudar a prolongar la relación sexual y obtener, por ende, mucho más placer. Muchos hombres se preocupan porque llegan al orgasmo demasiado rápido y no les da tiempo a que su pareja quede satisfecha. Hay medicamentos para ello que puede prescribirte tu doctor, pero también puedes probar estas técnicas de relajación.
