Pídele ayuda a tu esposo: esto les resulta difícil a muchas mamis, especialmente si están en casa todo el tiempo y el esposo trabaja afuera. Pero recuerda que ser ama de casa es también un trabajo de tiempo completo. Así que puedes y debes esperar que tu marido se ofrezca para ayudar. Puede ser que cocine la cena dos veces por semana o que haga las compras del supermercado. Quizá que juegue con los niños una hora cuando llega a casa para que tú puedas relajarte un poco. “Después de que empezó a ayudarme en casa”, dice Aimee, una mamá a tiempo completo de dos niños, hasta mi esposo tiene que admitir que entiende mucho mejor cómo me siento y cuánto hago durante el día”. Yo estoy con Aimee, mi propio esposo hace la cena cuando yo tengo trabajo pendiente, y yo hago lo mismo por él. Después de todo, somos un equipo.
