De acuerdo con Budget Travel: “El área rodeando a San Miguel de Allende tiene aguas termales alcalinas, con azufre y con agua fresca, aunque las dos primeras son las más populares para bañarse. A pesar de las leyendas de que estas aguas tiene efectos “que revierten el envejecimiento”, la mayoría de las personas que se bañan vienen a relajarse debajo de las cataratas y a absorber los minerales naturales generales terapéuticos”.