Hay algo tan indulgente en los alimentos que necesitan que los comas con las manos. Tocar tu comida crea una conexión con ella que llama a un nivel primitivo básico. Sentarte con un recipiente lleno de mejillones definitivamente da este placer primitivo, más porque buscar cada pequeña concha es como una búsqueda del tesoro, que es recompensada con bocaditos suaves. Y el caldo que las acompaña siempre sabe incluso mejor cuando lo tomas con el mejillón y lo bebes de la concha. Este es uno de mis clásicos favoritos; sin embargo, no hay razón para que sean exclusivos de las salidas a cenar, especialmente cuando puedes hacerlos más frescos y más baratos en casa.
Querrás comprarlos tan frescos como sea posible, pero puedes guardarlos en el refrigerador por algunos días antes de prepararlos si lo requieres. Recuerda que estos chicos están vivos y necesitan aire, así que no los cubras en un contenedor cerrado. Almacénalos en el refrigerador en un recipiente grande y pon una toalla húmeda encima de ellos. Esto les dará suficiente humedad y les permitirá respirar. Cuando estés lista para cocinarlos, la regla básica de sacar los malos –explicada más abajo- es que deberían estar bien cerrados antes de cocinarlos y abiertos después.
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Una vez que dominas el truco de limpiarlos, son bastante fáciles de preparar y cocinar muy rápidamente. Además, puedes hacer incontables variaciones para satisfacer tu humor. Esta versión tiene un buen sabor picante por las salchichas Andaouille. De hecho, las salchichas le dan tanto sabor que no necesitarás mucho más para sazonarlo.
Sírvelos con una ensalada y pan crujiente, sobre pasta, o con papas a la francesa. Todo lo que necesitas realmente es una cuchara para sacar hasta la última gota de caldo y un recipiente para las conchas vacías.
MEJILLONES PICANTES CON SALCHICHA ANDOUILLE
Porciones: 4-6
Ingredientes:
4 libras de mejillones
2 salchichas Andouille, picadas en cubos pequeños (yo usé una versión de pollo sólo para mantener las cosas en el lado más ligero)
1 chalota mediana, cortada en cubitos
3-4 dientes de ajo, cortados en cubitos
1 ½ taza de vino blanco seco (yo usé un Sauvignon Blanc chileno)
5 tazas de caldo de pollo
2 cucharadas de cebolla de verdeo en rodajas
Aceite de cocina
Sal y pimienta recién molida negra
Instrucciones:
Para limpiar y preparar los mejillones:
1.Enjuaga bien los mejillones con agua fría para eliminar cualquier arena o gravilla.
2.Revisa para asegurarte de que todos los mejillones estén vivos. Los mejillones deben estar bien cerrados. Golpea firmemente cualquier mejillón que esté abierto. Si no se cierra en un par de minutos después de haber sido golpeado ligeramente, debe ser descartado. Los mejillones que están agrietados o tienen conchas rotas también deben ser desechados.
3.Quita la barba a los mejillones. La barba es el pequeño mechón que podrías ver saliendo de algunos de los mejillones. Simplemente quítalos de los mejillones que los tienen con un cuchillo o quítalos tirando de ellos con los dedos. No te preocupes si no quitas cada hebra. Las barbas no son perjudiciales, son sólo un poco feas y no tienen la mejor textura.
4.Una vez que les hayas quitado la barba, los mejillones se deben cocinar de inmediato.
Para preparar los mejillones picantes con salchicha Andouille:
1.Vierte una pequeña cantidad de aceite en una olla grande y calienta a fuego medio.
2.Añade las salchichas en cubitos y cocina hasta que estén ligeramente doradas, revolviendo con frecuencia. Retira las salchichas de la sartén y ponlas a un lado.
3.Desglasa la sartén con un chorrito de vino blanco, asegurándote de raspar los pedacitos marrones.
4.Añadir las chalotas y el ajo. Coce suavemente a fuego medio-bajo hasta que estén suaves.
5.Agrega el resto del vino blanco y deja que se reduzca hasta en una cuarta parte.
6.Añade cuatro tazas de caldo de pollo y una pizca saludable de sal y pimienta. Deja que la mezcla madre a fuego lento a fuego medio-alto durante unos diez minutos para que los sabores se mezclen. Prueba y ajusta la sazón.
7.Agrega los mejillones. El líquido debe llegar a cerca de 2/3 de la altura de la pila de mejillones. Añade la taza restante de caldo de pollo, según sea necesario.
8.Reduce el fuego a bajo, tapa y deja que los mejillones se cocinen durante 3 a 5 minutos. Destapa. Por ahora, la mayoría de los mejillones deberían haberse abierto. Si es necesario, cubre y cocina los mejillones durante un par de minutos. Los mejillones que no se hayan abierto en este punto deben ser desechados.
9.Añade la salchicha Andouille y las cebollas verdes y revuelve para incorporar y calentar. Prueba el caldo y ajusta la sazón por última vez.
10.Sirve los mejillones en un recipiente con caldo encima.