El manejo del estrés es una variable extraña de controlar durante las fiestas. Después de todo, las fiestas son un tiempo para reconectarte con la familia, esparcir la felicidad, mostrar gratitud, y relajarte mientras el año termina. Hay un tiempo para dar, para complacer y para expresar amor y aprecio a otros. Las fiestas también son una época de locura, muchos gastos, mucho estrés, horas empleadas en comprar regalos, esclavizarte en la cocina, y para cargar montones de equipaje y chucherías a lo largo de un aeropuerto mientras viajas con tus seres queridos. ¡Que comience la locura de las fiestas! No es un secreto que para muchas personas las fiestas son realmente un momento estresante del año. De acuerdo con una encuesta reciente llevada a cabo por Anxiety and Depression Association of America: “Cerca de tres cuartos de los participantes informaron que se siente más ansiosos o deprimidos durante la temporada de fiestas”. Lo cual significa que si estás preocupada por la temporada de fiestas que se aproxima, definitivamente no eres la única.
Hay muchas fuentes potenciales de estrés durante las fiestas—pasarte de tu presupuestos con tus regalos, tener altas (a menudo irreales) expectativas de las reuniones familiares, falta de tiempo libre, planes de viaje atrasados o cancelados, tiendas aglomeradas y más. Sin importar por qué sientas ansiedad durante las fiestas, no tiene por qué ser así. Las fiestas se tratan de felicidad, diversión e incluso el sentirte libre de ansiedad. Realizar unos cuantos cambios a tus hábitos pre-fiesta y un ligero cambio a tus acciones durante las fiestas puede ayudarte a evitar el estrés que has estado temiendo durante todo el año. Aquí hay unos tips útiles para el manejo del estrés que harán a las fiestas más felices y menos agotadoras para ti y para tus seres queridos.
Planea con anticipación
Para comenzar, dos palabras para llevar a la práctica: PLANEA CON ANTICIPACIÓN. Mucho de nuestro estrés por las fiestas está ligado a una pérdida del control. No tenemos control de nuestro tiempo, nuestra energía, nuestro dinero y nuestra vida. No dejes que eso te suceda. En lugar de eso, comienza a prepararte para las fiestas hoy. Haz tu lista invitados para las fiestas; realiza una lista para la compras de abarrotes y menú hoy; comienza a comprar los regalos de navidad antes que la locura inicie y antes que las líneas para comprar sean largas y ya no haya artículos. Comienza a envolver y a etiquetar los regalos el día de hoy para que no lo hagas la noche anterior. Mientras más pronto comiences a trabajar, es más probable que termines las cosas por adelantado, y pide ayuda si la necesitas. Más tiempo = menos estrés = más oportunidades para sentarte y disfrutar de las fiestas.
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Mantente alejada de las multitudes
Estar en cualquier espacio aglomerado puede ser abrumador y estresante, y sin sorpresa, las tiendas pueden quedar llenas durante la temporada de fiestas. Unas cuantas formas de evitar este ambiente que induce a la ansiedad son: 1) Comprar en línea, 2) Compra antes del caos y 3) Haz un pacto de cero regalos con los miembros de tu familia. Si todos acuerdan darse tarjetas mutuamente, experiencias o recuerdos hechos a mano en vez de comprar regalos, todo mundo disfrutará del mejor regalo de todos—cero líneas de espera y cero lidiar con esos compradores molestos e irritantes (y probablemente estresados).
Marca un precio límite
Si estás preocupada por tu flujo de efectivo durante las fiestas, establece un presupuesto estricto no solo para ti, sino para tus amigos y familiares también. Comprométanse a gastar una cantidad de dinero para que todo mundo compre regalos de cierto rango de precio; de esa forma nadie se sentirá culpable con respecto a no dar suficiente, y no te estresarás por la idea de tener que gastar más
Establezcan reglas cuando se trate del tiempo familiar
Si tienes familia que se está quedando contigo (ahem, tu familia política), entonces probablemente estés preocupada de que ellos invadan tu espacio, y sin un lugar a donde escapar, es extra difícil relajarse. Haz reglas con tu familia para asegurar que tendrás un cuarto para llamarlo “tu espacio” y un lugar que está fuera de los límites para los invitados. También, pide a esos familiares que ayuden con los quehaceres y responsabilidades, ya sea que sean los platos o cuidar de los niños, para que no tengas que cargar con todo el peso y tengas oportunidad de relajarte al final del día.
Encuentra tiempo para ejercitarte
El aumento de peso en las fiestas es un problema real para muchas personas. De acuerdo con un artículo en Health Magazine: “Los estudios muestran que mucha gente gana un par de libras en las fiestas y puede convertirse en un círculo vicioso: El comer en las fiestas te estresa y el estrés de las fiestas te hace comer”. Para romper el círculo, asegúrate de apegarte a tu rutina regular de ejercicio, incluso en la temporada de fiestas. Hasta caminar diario en el exterior puede ayudarte a desestresarte y sentirme mejor con tu cuerpo y tu salud. Y aunque las comidas de las fiestas tal vez sean ricas, el resto de tus alimentos no necesariamente tiene que serlo. Comienza tu día con un desayuno saludable y balanceado y cargado con vegetales para que tu cuerpo se nutra, y mantente hidratada bebiendo durante el día.
Concéntrate en ti misma
Es fácil gastar toda tu energía concentrándote en los demás durante las fiestas, pero esa actitud, aunque es generosa y proviene de un buen lugar, de hecho hace más daño que bien. De acuerdo con George Pratt, PhD, un psicólogo en el Scripps Memorial Hospital La Jolla en California: “Nos excedemos para complacer a otros durante las fiestas: compramos, cocinamos, mandamos tarjetas y asistimos a cada evento… en vez de eso, cuida de ti diciendo “no” por lo menos una vez—y tal vez más”.
