1). Te dan enfoque y dirección
Con el fin de alcanzar un objetivo, tienes que saber dónde apuntar. Con el fin de llegar a tu destino final, necesitas saber en qué dirección tienes que ir. Sin una meta final, no sabrás dónde comenzar, hacia dónde ir y te será muy difícil centrar tus esfuerzos en las tareas. Los objetivos te obligan a centrarte, apuntan en la dirección correcta y te proporcionan un camino para trabajar hacia un esfuerzo mayor para que puedas alcanzar la felicidad y el éxito en todas las áreas de tu vida.