Actualizado (UPDATED) el 17th de junio de 2017
Que a nuestros hijos no les vaya bien en el cole es una fuente de estrés para nosotros. Queremos lo mejor para nuestros pequeños. Sabemos que un buen promedio en las notas de la escuela es un billete de ida a la universidad y a un buen futuro. Y nos han taladrado la cabeza con la idea de que el éxito académico de un alumno empieza en su primer año escolar, así que es normal que cuando nuestro a nuestro niño de primaria le va mal, nos pongamos ansiosos. Digo… nos estamos jugando su futuro, ¿no?
Aunque notas bajas o mal comportamiento en primer y segundo grado no signifiquen que tu hijo vaya a tener un futuro académico paupérrimo, es normal que sea una fuente de preocupación. Puede ser difícil encontrar el equilibrio entre “no es más que una fase” y “Dios mío, va a ser un fracaso”. Si lo minimizas puedes estar actuando negligentemente, pero si sobreactúas, crearás un ambiente de tensión negativo e innecesario.
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