10. Recordar que una vez nuestros padres fueron niños también. No tengas miedo de pedir asesoramiento a tus abuelos sobre cómo criar a tus hijos, después de todo, criaron a tus propios padres.
9. Pasar tiempo con tus seres queridos. Nunca te vas a arrepentir de pasar más tiempo con tus seres queridos. Se habrán ido antes de que te des cuenta y sólo lamentarás no haber pasado más tiempo en su presencia, disfrútalos ahora.