2. Mantén tu espacio de trabajo separado de tu espacio personal
Tienes un escritorio, pero 9 de 10 veces terminas trabajando en la mesa de la cocina, en el sofá de tu sala, o en el peor de todos, tu cama. Le pasa a las mejores que trabajan desde casa, pero puede ser realmente dañino para tu vida personal y tu carrera. Es fundamental tener un espacio en tu casa que sea específicamente para que trabajes y solamente para que trabajes.