Desde el año 2006, Pantene ha donado más de 28.000 pelucas de pelo natural al banco de cabello del American Cancer Society, que las distribuye a pacientes con cáncer a través de todo el país. Hombres y mujeres de todas las edades han donado su cabello durante años, y sus historias son tan diversas como su color de cabello. Brittany, una superviviente del cáncer de ovarios que perdió su propio pelo durante la quimioterapia, eligió donar su propio cabello renacido después de haber alcanzado una meta inmensa en su vida, la de haber estado libre de cáncer por cinco años. Otra mujer joven y tímida, Tamara, solía ocultarse detrás de su melena hasta que donó su coleta y se hizo un corte de pelo que la hizo brillar.