Se consistente con las reglas y no cedas. Si tu niño está haciendo demandas y está siendo inflexible, no cedas solo para que puedas tener un espacio tranquilo y relajado. Si tu niño tira su plato de spaghetti al piso cuando ya le has dicho anteriormente que no lo haga, ponlo en su silla alta y dile que tiene un tiempo fuera. Apégate a las reglas que has puesto y al tipo de castigo que tú aplicas. Recuerda, la consistencia es la clave con los niños. Ser flexible con las reglas sólo enviará un mensaje mezclado, el cual los confundirá y los invitará a probar tus límites.
Pasamos mucho tiempo de nuestros días diciendo no a nuestros hijos que algunas veces no celebramos las cosas buenas que hacen todos los días. Es importante que constantemente fortalezcas su autoestima. Los niños recuerdan las frases positivas cuando se las decimos, las retienen y reproducen estas frases en su mente. Pídele a tu hijo que te ayude con tareas simples como barrer alrededor de la casa o regar las plantas o que te ayude a bajar las compras. Verás lo emocionado que se pondrá cuando obtenga un cumplido por su ayuda. Ayudar los hace sentirse importantes y grandes sin tener que ser autoritario con alguien.