La práctica hace al maestro, y la única forma de saber qué se verá bien en tu dedo, es probarte diferentes formas, estilos, composiciones y piedras. Suena como una muy buena idea, ¿no? Básicamente tienes permiso de ir y jugar con anillos hermosos y brillantes. Pero aquí es cuando las cosas se vuelven complicadas; una vez que descubres qué quieres, ¿cómo entregas ese mensaje a tu novio sin ofenderlo o ser atrevida o molesta? Es un apuro, pero tenemos consejos para ayudarte a caminar la vereda del compromiso.
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