Leche de almendras
Este sustituto de la leche es suave en sabor, pero a algunos realmente no les gusta el sabor y la textura de la almendra. Para remediarlo, los fabricantes suelen añadir espesantes y emulsionantes que han sido objeto de escrutinio por no ser de lo mejor para nosotros a pesar de que derivan de cosas como algas. La leche de almendras, cuando se compra o se hace en casa sin ingredientes o edulcorantes añadidos, es baja en grasa, baja en calorías y baja en carbohidratos. Es un poco como el agua ligeramente saborizada, en realidad, no se parece tanto a la leche. Ahora, cuando se le agrega espesante y un saborizante, su sabor es increíble, con una gran sensación en la boca y un toque nutritivo mayor que sus contrapartes: la soja y el arroz. Obviamente, las personas con alergias a las nueces deben tener precaución y, al igual que con cualquier otra cosa, demasiado de algo bueno casi nunca es una buena cosa.
