La solución: haz que el que habla español en la familia siempre se dirija a los niños en esa lengua, incluso cuando respondan en inglés. Al final se acostumbrarán y contestarán en español.
2. LOS NIÑOS NO QUIEREN HABLAR EN ESPAÑOL PORQUE SUS AMIGOS NO LO HACEN
La influencia de los pares juega un papel vital en hablar, o no, otro idioma en la niñez. Es muy normal que los niños hablen español sin problemas en casa no quieran hacerlo más cuando descubren que sus compañeros no lo hacen. El hecho de que las tareas y deberes del colegio sean en inglés también puede perjudicar a sus habilidades para hablar español, puesto que pasan mucho más tiempo hablando inglés.
