9. Presta atención a cómo las matemáticas se utilizan en la vida cotidiana.
Bien, bien, quizá, a veces, usamos esas habilidades matemáticas que nunca pensamos que necesitaríamos. Piensa en cosas como cocinar, decir la hora, pagar una mensualidad o ir de compras y habla con tu hijo sobre cómo estas actividades involucran a las matemáticas.