En vez de gastar tu tiempo intentando fortalecer tus debilidades o hacerlas desaparecer, considera la alternativa: encuentra tus fortalezas. Todos tenemos debilidades, incluso si durante las entrevistas de trabajo dices que son “comprometerte demasiado” o “involucrarte de más en el trabajo”. Así que llegó el momento de trabajar realmente duro para lograr más, y escúchanos cuando te decimos que la mejor manera de hacerlo es posiblemente ignorando tus debilidades.
La coach profesional Astrid Baumgardner dice: “una vez que conoces tus fortalezas, considera qué tan bien las estás aprovechando. Muchas veces, las personas que no tienen suficiente satisfacción en sus vidas, posiblemente no están aprovechando lo suficiente sus fortalezas.” Tu desempeño en el trabajo podría cambiar drásticamente (para mejor) si, en vez de enfocarte en atacar tus debilidades, te enfocas en encontrar tus fortalezas. Aquí hay algunas maneras de hacer las cosas mejor y sentirte mejor en el trabajo, aprovechando tus fortalezas.
1. Identifica tus fortalezas.
Puedes pensar que las conoces pero tómate un momento para analizar tu último empleo y ver en qué cosas destacaste o haz una lista de las cosas en las que piensas que eres muy buena. Piensa también en las partes de tu trabajo que disfrutas. La mayoría nos desempeñamos mejor en aquello que nos encanta hacer. Además, mantén en mente lo que tu lugar de trabajo necesita: resolución creativa de problemas, liderazgo, diplomacia, etcétera.
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2. Mantén tu lista de fortalezas a la vista.
Mantén la lista de tus fortalezas en un lugar discreto en donde puedas verla fácilmente durante el día –como un cajón, por ejemplo-. Cuando veas tu lista durante el día, úsala como un empuje a tu confianza y recuerda enfocarte en esas fortalezas a lo largo del día.
3. Ocúpate de tu crecimiento
Si tienes una habilidad, como hablar en público, busca oportunidades para dar sesiones de capacitación, seminarios o presentaciones para tu empresa. Debes saber lo que tienes y después encontrar una oportunidad de utilizarlo.
4. Sé generosa con tus fortalezas
Ofrece a un amigo o colega usar tu habilidad para ayudarle, sin esperar nada a cambio. Ya sea que necesiten ayuda con algunos números u organizando la reunión de Navidad anual de la oficina, recordarán tu maravillosa contribución después y definitivamente será algo que te beneficiará.
5. Haz al ser agradable una de tus fortalezas
Sé agradable y educada con tus compañeros de trabajo. Así ellos te verán de una manera positiva, lo que significa que notarán tus talentos y te darán oportunidades para usarlos.
6. Sé entusiasta, pero no demasiado.
Es genial que te encante tu trabajo, pero ser demasiado entusiasta puede hacer parecer que estás presumiendo. Siéntete orgullosa y emocionada por tus proyectos, pero sé diplomática al respecto.
7. Sé una líder pero no seas déspota.
Si liderar equipos es tu fortaleza, es fantástico. Sin embargo, balancea tus habilidades de liderazgo con tus otras fortalezas para que tu equipo no se sienta controlado y acosado por tu supervisión.
8. Intenta no quejarte, al menos no sin un motivo.
Si tienes un problema real en el trabajo, pasa por los canales apropiados para resolverlo. Sé positiva en el trabajo y las personas lo notarán.
9. Haz un esfuerzo extra.
Asegúrate de que tu jefe se dé cuenta de que estás haciendo un esfuerzo extra y excediendo las expectativas de vez en cuando. Pero también sé discreta. A nadie le gusta un “lamebotas” en el trabajo.
10. Acepta los cumplidos y las felicitaciones, pero sé humilde.
Disfruta del reconocimiento con gracia. Y créenos que cuando hagas brillar tus fortalezas en el trabajo, el reconocimiento llegará.
