Comencemos con unas actividades artísticas y manualidades para mantener a los niños creativos ocupados. Seguro, ellos quizá pasan el año escolar entero trabajando en un estudio de arte o pintando en su escritorio, pero en verano, ellos pueden mostrar sus habilidades a lo grande en el exterior. Lleva contigo algo de material básico para las manualidades de casa (como pinturas, pegamento, papel, crayones, etc.) y deja que el flujo creativo inicie. Puedes recolectar conchas marinas para pintar y decorar, o usarlas para hacer hermosos jarrones o campanas de viento. También puedes animar a todos a que pinten o dibujen lo que ven, mientras miran al océano y luego todos pueden comparar las obra de arte que han hecho.
Si quieres ensuciarte las manos y abrazar a tu arquitecta interna, construye un castillo de arena. Sí, lo sabemos… que concepto tan innovador… construir un castillo de arena en la playa. Pero puedes llevarlo al siguiente nivel para que hasta los niños más grandes puedan disfrutar de esta actividad. Comienza haciendo un sketch del plan para la construcción de arena y luego deja que la diversión comience. También puedes dividir para conquistar las tareas y así todo mundo tenga una trabajo (sí, tú incluida) para que tus hijos aprendan sobre la responsabilidad y el trabajo en equipo.