Nadar. Crecí en una casa con piscina y esa era una de mis actividades favoritas al aire libre. Mientras no hayan rayos y truenos, nadar bajo la lluvia es perfectamente seguro si se hace bajo supervisión adulta. La tecnología actual te permite incluso revisar el radar meteorológico para asegurarte de que la costa está despejada antes de que los niños se sumerjan en el agua.