Cuando se trata de cilantro fresco, parece que no hay un área intermedia: lo amas o lo odias. Si fuiste criada en un hogar latino o asiático, probablemente pones la hierba verde modesta que se parece al perejil en casi todo. Sin embargo, si no fuiste criada cerca del cilantro, probablemente lo evites porque “huele a jabón” o “sabe a bicho aplastado” como sus opositores lo han dicho.
De acuerdo con The Oxford Companion to Food, la palabra coriander (cilantro) está derivada de la palabra griega para “chinche”, ya que su aroma era comparado por los europeos hace cientos de años con el olor de ropa de cama infestada de bichos. Julia Childs, la renombrada chef, una vez proclamó que el cilantro tenía un sabor a muerte, ella dijo: “Lo identificaría si lo viera y lo tiraría al piso”. Y si Julia viviera el día de hoy, es probable que también hubiera mencionado sus sentimientos fuertes con respecto a la hierba en el sitio web, I Hate Cilantro.com. Pero si hay haters, también hay lovers; hay muchos grupos de amor hacia el cilantro, por ejemplo en Facebook.
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Entonces, ¿son nuestras prácticas culturales y exposición a esta hierba conflictiva lo que nos hace fans o no? Estudios han demostrado que el ADN forma nuestra opinión del cilantro. Como el Huff Post reporta, el show de Hank Green, SciShow, explicó que los científicos fueron capaces de ubicar a los haters del cilantro como: “Personas que comparten genes receptores olfativos, llamados OR6A2, que se percatan del olor de aldehído químico. Los aldehídos químicos son encontrados en ambos, en el cilantro y jabón”.
Pero los cilantrofóbicos no están del todo perdidos. Supuestamente, si tienes muchas experiencias positivas cuando comes cilantro con tus seres queridos o en unas vacaciones memorables por ejemplo, tu cerebro comienza a asociar esos buenos recuerdos mientras empuja a tu desagrado innato hacia estos contextos. Si tienes un hogar con opiniones dividas con respecto al cilantro, intenta preparar pesto de cilantro fresco en casa, ya que el acto de triturar las hojas ayuda a neutralizar el sabor. Luego usa suficiente queso parmesano para camuflar el sabor, y observa a esos dos campos divididos disfrutar.
