Sucede cada tres meses, justo cuando has elegido la selección perfecta de faldas y has encontrado las prendas correctas para combinarlas, llega una nueva estación y un patrón de clima completamente diferente. Bueno, deja de empacar tus faldas favoritas y de resignarte a usar pantalones por el resto de la temporada. Con un poco de creatividad y experticia, tus favoritos del verano pueden convertirse en trajes para el otoño.