En este mundo de hoy vivimos conectados a Internet en el trabajo, en las actividades de ocio, en casa y hasta cuando estamos en marcha. Y, desde luego, todo ese tiempo que pasamos conectados no es siempre productivo, además, ¿qué efecto tiene en nuestras relaciones personales todo ese tiempo que pasamos enchufados a Internet?
Es cierto que estamos constantemente conectados con nuestras familias y amigos a distancia, y tenemos acceso a más información que antes, pero algo primitivo en nuestro interior nos dice que necesitamos desconectar para reconectar con la familia que vive bajo nuestro mismo techo, la naturaleza, y con nosotros mismos.
Así que, si te has prometido que pasarás menos tiempo en Internet, te ofrezco 10 consejos para que lo consigas.
1. Date de baja de boletines informativos y otros correos electrónicos que recibes pero nunca lees. Durante las próximas dos semanas, tómate el tiempo de buscar esos correos y darte de baja haciendo clic en el enlace de “baja”. Menos correos, menos tiempo que pasarás en Internet.
2. Ten un plan cuando te vayas a conectar. No te conectes y vagues sin rumbo fijo haciendo clic en cualquier enlace que te parezca interesante. Haz una lista de lo que quieres hacer. Igual que si de la lista de la compra se tratara.
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3. Ponte un temporizador. Compra un temporizador de cocina barato y ponlo en la mesa. Sincronízalo para que suene en una hora. Quizá el tic tac del reloj te ayude a ser más rápida y productiva. Te sorprenderá lo rápido que se te acaba el tiempo.
4. Programa un horario de trabajo diario. Aunque no te apetezca imponerte unas horas específicas para limitar tu uso de Internet, programa actividades que tengan lugar en la vida real para tener tiempo garantizado lejos de tu silla y en pie.
5. Deshazte de aplicaciones en el teléfono que hagan que tengas fácil acceso a las redes sociales. O considera cancelar tu plan de datos. Si el acceso a Internet no es esencial para tu trabajo y te encuentras mirando innecesariamente tu correo o mirando Facebook a la hora de cenar, es el momento de considerar una medida drástica.
6. Márcate un día sin Internet. No tiene por qué ser un sábado o domingo, pero son los mejores días porque no son días laborables y tu familia normalmente está reunida en casa. Haz esto al menos una vez a la semana.
7. Encuentra un nuevo pasatiempo que te apasione. Aprende a tejer o cualquier tipo de expresión artística. Empieza a practicar yoga, montar en bicicleta o kickboxing. Apúntate a clases de cocina o de idiomas. Estas actividades ampliarán tus conocimientos y mente. Mantente ocupada lejos de la computadora, y si te encanta lo que haces, no echarás de menos Internet.
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8. Cierra la sesión cada noche. Cuando hayas terminado de usar Internet, cierra la sesión de cada cuenta y así no será tan tentador entrar otra vez en cuanto te despiertes. Siéntate a desayunar. Mira la salida de sol. Medita o reza en silencio durante unos minutos. Haz tu cama. Todas estas cosas te ayudarán a marcar el ritmo de tu día.
9. ¡Cierra esas pestañas! No tengas todas tus cuentas de medios sociales abiertas mientras trabajas. En vez de eso, sal y céntrare en lo que estás haciendo. Si dejas estas pestañas abiertas todo el día, es una distracción que hará que trabajes más despacio y estarás aun más conectado.
10. Bájate RescueTime. Es una herramienta para manejar tu tiempo y además te ayuda a seguir tu productividad. El modo “Focus” te permite bloquear ciertas zonas de Internet por un tiempo concreto. El seguimiento de tiempo de “RescueTime, contabiliza cuánto tiempo pasas online y dónde. Al final de la semana te enviará un e-mail con un informe detallado y gráficos muy claros de tu productividad. Si estás en estado de negación, aquí encontrarás los datos puros y duros para abrirte los ojos a la realidad.